domingo, 3 de junio de 2007

Libertad bajo palabra

La palabra es algo importante. Dependiendo del número de seguidores exitosos de la filosofía Zen o análogas, creo no estar equivocado al afirmar que las palabras son parte esencial de la maquinaria de nuestro pensamiento.

Soy de la idea que hay que cuidar lo que pensamos, y con ello también lo que decimos o escribimos. ¿No es por eso que hay que hacer los mayores esfuerzos para que nuestra sintaxis al expresarnos sea la mejor posible?

Respetar reglas no va en menoscabo de la creatividad. Pienso que por el contrario: es un método para imponer orden al caos. Incluso obras tan aparentemente aleatorias como las de Jackson Pollock tienen cierto orden fractal. Puede que hasta renunciar a las reglas sea una forma de seguirlas.

2 comentarios:

saul dijo...

Tiene razón, estimado paisano, la ortografía es algo que debe atenderse. Me apena mucho aceptarlo, gracias por su crítica.

Octavio dijo...

¡Paisano! ¡Qué grata sorpresa! Pues soy de la idea de que hay que poner el ejemplo, es una forma un poco más efectiva de sugerir una conducta, aunque a veces no puedo evitar ser más explícito en mis críticas. :-D